Ay, allá, hay, ay
no me puedo acostumbrar a mis pellizcos
y la luna que solamente sale cuando la necesito
"apaga la luz que me molesta, deja que la noche
se coma nuestro ser" letra de una canción muy vieja.
Y veo las enormes alamedas desde una banca de metal
fumándome un Gitane
Por que me enredaste las trenzas, con tu cordel de estambre
tricolor
ahora que viene el bicentenario, más me dan ganas de besarte
a una orilla del puesto de aguas
y muchas aguas nos echas de la policía que enfría
el macanazo final
No puede ser, cada que te veo estas distinta
tus manos se parecen a los arboles delgados del invierno
que ya se termina y, ahora, se animan a las caricias que la
primavera no puede esperar.
Viajo metido en mis zapatos, para hundir mis pies por este mundo
tan brevemente que me alcance para pasear
por tu frente y también por tu vientre y ahí
quedarme un rato a dormitar.
Yo digo que no hay más ruta que la que todos debemos transitar
cuando el cuerpo es una Harley que hay que echar a andar.
